Concédenos, Señor,
un poco de calor, para nuestra frialdad;
un poco de consistencia, para nuestro barro;
un poco de agua, para nuestra sed;
un poco de luz, para nuestros momentos oscuros;
un poco de alegría, para nuestras penas;
un poco de ternura, para nuestras debilidades;
un poco de amor, para nuestro egoísmo;
un poco de ilusión, para nuestra desgana;
un poco de firmeza, para nuestras decisiones;
un poco de vida, para nuestra vida.
Concédenos, Señor,
un poco de escucha, para tu palabra;
un poco de sabiduría, para ser felices;
y un poco de tiempo, para aprender a ser hijos.
Concédenos, Señor...
congruencia, prontitud, disposición.
Aunque no te pidamos nada
o te digamos todo lo contrario...
Concédenos, Señor.
Ulibarri Fl. |